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En el peor momento de Peñarol, cuando mas precisaba goles en el final de la temporada 2020, apareció como agua en el desierto, si bien era nombrado por diferentes allegados al club, ningún entrenador le daba la posibilidad de jugar en primera .
La tercera división ya le quedaba chica y tenía que dar el paso al fútbol grande, y fue Mario Saralegui que un poco por la urgencia de cambiar cosas en el equipo y otro poco por intuición de que sería el gran goleador que precisaba, lo mando a la cancha.
El centrodelantero luego de un par de partidos consigue anotar su primer gol en la institución, fue ante Plaza Colonia en el estadio Juan Prandi, por ese entonces la Copa Libertadores alternaba con el campeonato uruguayo y el juvenil jugaba siempre de titular, la sequía goleadora la vivió en el final de esa temporada cuando estuvo 9 partidos sin poder marcar.
El año 2021 para Álvarez Martínez sería para encuadrar, jugando en un nivel superlativo, no solo marcando goles sino asistiendo o generando situaciones que terminaban en gol de algún compañero. Su punto más alto llegó en la Copa Sudamericana donde marcó 10 goles siendo el máximo goleador de la edición de ese año.
El gran desempeño en su equipo lo llevó a la Selección Uruguaya donde pudo debutar en partido correspondiente a Eliminatorias Sudamericanas pensando en el mundial de Qatar, en ese mismo debut llegó si primer grito de gol con la celeste, fue ante Bolivia en el Campeón del Siglo.
En el aurinegro disputó 72 partidos y anotó 33 goles, una marca que lo puso en el radar de varios equipos europeos, que comenzaron a preguntar por su cotización. Ya siendo campeón uruguayo con su club, de haber sido goleador de Copa Sudamericana y con el debut en la selección mayor de nuestro país, el goleador fue sondeado por Fiorentina, el equipo italiano hizo una oferta que no cumplió las expectativas que pedían los dirigentes de Peñarol.
Los goles desde el 2021 no aparecen, el último fue el 22 de noviembre cuando en el estadio carbonero puso el 1-2 transitorio ante Cerro Largo. Ya van 607 minutos sin poder convertir, varios partidos, un verano con la ilusión de la transferencia y un comienzo de campeonato uruguayo que no fue el que pretendía, incluso errando un penal en el Parque Capurro en la primera fecha del apertura.
La ausencia de goles se puede analizar desde la falta de juego colectivo del equipo de Mauricio Larriera, de las grandes actuaciones de los porteros que enfrentan a Peñarol o de la partida de su gran socio en el club, Facundo Torres, transferido a Orlando City de la MLS en el último mes de enero.
Los números no han sido buenos en el último tiempo pero su condición de goleador hace que los hinchas deben estar atentos porque en cualquier momento el “canario” vuelve a cantar.
